RIBÓ RECLAMA AL GOBIERNO INVERSIÓN PARA EJECTUAR EL TRAMO DE LA T2 HASTA NATZARET


I. Domingo  - 14 junio 2017, 01:03 - Las Provincias
La pelota, en el tejado del Gobierno central. Es lo que hizo ayer el alcalde de Valencia, Joan Ribó, ante las críticas de los vecinos de las Moreras y Nazaret tras conocerse la reanudación de las obras de la T2 pero sólo en el tramo comprendido entre la calle Alicante (junto a la estación del Norte) y El Oceanogràfic, excluyendo a estos dos barrios hasta una fase posterior.

Así, Ribó atribuyó a la falta de financiación estatal esta decisión y, por ello, planteó al presidente de la Generalitat, Ximo Puig, que inste al Ejecutivo de Mariano Rajoy a que financie la construcción de esta línea de metro y tranvía, ya que, a su juicio, sería «una alternativa viable para la consecución de la T2 en toda su amplitud, desde el Pont de Fusta hasta Nazaret». E incluso planteó la posibilidad de que pueda prolongarse hasta el puerto.


Para justificar la petición, el alcalde echó mano de Andalucía y recordó que Fomento tiene un convenio, firmado en 2005, con la Junta de Andalucía por el esta autonomía recibirá 393 millones para las obras del metro de Sevilla y Málaga. «No se trata de que queramos más que otras ciudades sino de exigir un trato justo e igualitario», indicó.

Por su parte, la Conselleria de Obras Públicas justificó la decisión de ejecutar en un primer momento la línea hasta la Ciudad de las Ciencias en la necesidad de dividir las obras en dos fases para poder optar a los fondos europeos, ya que Bruselas sólo aportará 20 millones al haberse reasignado fondos Feder correspondientes a la Comunitat. La Generalitat aportará otros 30 millones de su presupuesto para la primera fase de la actuación.
Fuentes del departamento que dirige María José Salvador indicaron que «desde el primer momento el Gobierno valenciano ha tenido encima de la mesa la situación de la T2 y se han buscado todas las soluciones posibles. Nuestra intención es poner en marcha todo el trazado, por eso se ha recurrido a fondos europeos y se ha pedido al Estado que deje de discriminar a la Comunitat y aporte financiación al metro de Valencia como financia otros metros en España».

Las mismas fuentes recordaron que volverán a plantear la posibilidad de lograr más ayudas europeas en el próximo Programa Operativo 2020-2026 para lograr «la continuidad de la financiación para abordar esta obra». Según dijo el lunes la consellera, harían falta otros 33 millones para acabar el primer tramo.

Mientras, los vecinos anunciaron la convocatoria de una reunión para el viernes para «recabar toda la información y decidir qué pasos damos», explicó el portavoz de la asociación vecinal de Nazaret, Julio Moltó. Asimismo, desde la Federación de Vecinos se trabaja para que la Generalitat explique a los barrios la reactivación del proyecto.

Moltó lamentó que la decisión de la Generalitat no haya tenido en cuenta que el Levante UD vaya a ubicar en Nazaret la ciudad deportiva ni el Parque de la Desembocadura que unirá el barrio marítimo con el puerto y la ciudad.




La T-2 pasa por Madrid: València reclama a Rajoy que cofinancie las obras para llegar a Nazaret

Valencia Plaza
13/06/2017 -  VALÈNCIA. La recuperación de las obras de la T-2 ha sido una noticia agridulce para la ciudad de València. Si bien por un lado fue bien recibida porque suponía recuperar una inversión abandonada desde 2011, por el otro tenía el regusto desagradable de que dejaba de lado a un barrio de por sí marginado, Nazaret, una vez más. Las protestas vecinales no han caído en saco roto y desde el Ayuntamiento de València rápidamente han intentado buscar una solución para hallar la financiación que se precisa. Y ése no es otro que el Gobierno Central, el cual ha abandonado este año a la Comunitat Valenciana en unos presupuestos generales que han sido ampliamente respondidos.

El alcalde de València, Joan Ribó, fue quien puso este martes el foco sobre al Gobierno Central, “en manos del Partido Popular” recordó, para exigirle que lleve a cabo en la ciudad “al menos las mismas inversiones para la infraestructura del Metro que las que tiene comprometidas para idéntico fin en las ciudades de Sevilla y Málaga”. Ribó contempla ésta como una alternativa viable para la consecución más rápida de la T-2 en toda su amplitud: “desde el Pont de Fusta hasta Nazaret, e incluso completar la línea hasta el puerto y el Canyamelar, uniéndola a la ya existente en el frente marítimo”.

Ribó propuso al president de la Generalitat, Ximo Puig, solicitar al gobierno de Mariano Rajoy, y en concreto al Ministerio de Fomento, un convenio como el que ya tiene entablado con la Junta de Andalucía, por el que esta administración autonómica recibirá un total de 393 millones para las obras del metro de Sevilla y Málaga. “El gobierno central financiará estas infraestructuras, mientras en València, el proyecto de la T-2 languidece sin financiación estatal, y nos vemos obligados a recurrir a fondos europeos. Por eso, pasamos de la protesta a la propuesta: un convenio como el firmado en 2005 entre el gobierno de España y el andaluz, por el que plurianualmente la Junta de Andalucía recibe fondos estatales para la movilidad de estas dos ciudades, con un volumen poblacional menor que el de València”.

175 millones para Málaga, 218 para Sevilla

Desde el Ayuntamiento de València recordaron que la Administración General del Estado y la Junta de Andalucía firmaron el 22 de diciembre de 2005 un convenio “cuyo objeto es articular la colaboración de la AGE en la financiación del coste de la inversión” del metro en estas ciudades. La vigencia del convenio se extiende desde 2005 hasta 2037 en el caso de Málaga, y 2035 en el caso de Sevilla, siendo las aportaciones de 175.110.253 euros para el metro de Málaga, y 218.313.046 euros para el de Sevilla.

Según explicó Ribó, “este convenio prevé una concesión privada para la puesta en marcha del metro en Sevilla y Málaga mientras duren todas las obras. Así, el gobierno central financia la construcción del metro en estas ciudades mediante pagos anuales a la Junta de Andalucía, que esta a su vez traslada a las concesionarias”. De esta manera, se establece que en 2035 y 2037 las respectivas líneas deben estar completamente finalizadas.

Por ejemplo, este año los Presupuestos Generales del Estado (PGE) recogen una transferencia de capital a la Junta de Andalucía por un montante de 12.269.000 euros “para la anualidad de 2017”. Así, en el caso de la infraestructura sevillana la cuantía asciende a 6’5 millones de euros, mientras que a la malagueña se conceden otros 5’6 millones. Incluso, los PGE incluyen también una transferencia de 406.000 euros al Cabildo Insular de Tenerife para la financiación del Tranvía/Metro Ligero Santa Cruz de Tenerife-La Laguna, para el pago de la liquidación pendiente del convenio suscrito con la Administración General del Estado.

“Trato justo e igualitario”

“No se trata de que queramos más que otras ciudades”, indicó Ribó, “sino de exigir un trato justo e igualitario. Si los valencianos pagamos nuestros impuestos como cualquier ciudadano, tenemos derecho a una financiación y unas inversiones como el resto de ciudades. Este es un buen momento para rectificar la injusticia de los Presupuestos Generales del Estado de PP y Ciudadanos que discriminan a València. Exigimos para València una línea T-2 completa, y una inversión del Estado, como en otras ciudades, que la haga factible. Exigimos, por tanto, un convenio similar”.

El alcalde de València reiteró la “necesidad imprescindible de que, de una vez por todas, el Gobierno del Estado se acuerde de que en València tenemos un área metropolitana con 1,8 millones de habitantes que entran y salen de la ciudad y que, igual que en las otras grandes área metropolitanas, el Estado tiene la obligación de financiar tanto la inversión como el funcionamiento del transporte público”. El alcalde ha valorado positivamente el “frente común del Ayuntamiento y la Generalitat por defender los intereses de los valencianos y las valencianas”.

Para Ribó, “no es razonable ni justo paralizar por la mala gestión del PP primero, y por falta de apoyo económico estatal después, una infraestructura de movilidad que es absolutamente necesaria para articular la ciudad; la T-2 es imprescindible para conectar muchos barrios: pasa por Regne de València, y conecta Russafa y l’Eixample, continúa por la calle del General Urrutia… Queremos que llegue hasta Nazaret y que en una segunda fase se conecte con el puerto y con el Canyamelar”. “La conexión de nuestros barrios es un objetivo fundamental del Govern de la Nau”, apostilló.

Sarrià:  “Una obra faraónica que se dejó inconclusa

Todavía sobre el anuncio de ayer respecto de la T-2, el concejal de Desarrollo Urbano, Vicent Sarriá, a preguntas de los periodistas durante su asistencia a la demolición de la antigua fábrica de cerveza de la calle Sant Vicent Màrtir valoró “el esfuerzo financiero y de reformulación de fondos europeos para poder acometer una infraestructura prioritaria para la ciudad; es una muy buena noticia. Si esta obra no se acometiera, no es que no se llegara a Nazaret, es que no llegaría a ninguna parte”, insistió.

“Estamos hablando de una obra faraónica que se dejó inconclusa”, indicó Sarriá, “cuyo final era teóricamente el Pont de Fusta. Por lo tanto, exige una inversión muy potente, con unos estudios técnicos muy importantes que permitan viabilizar su uso temporal entre Nazaret y la calle Alicante. En esta calle, la T-2 era pasante, no estaba diseñada para que los trenes retrocedieran. Esto va a exigir reformular el proyecto”, explicó el concejal de Urbanismo.


Comentarios

¿Quieres enviarnos alguna queja o comentario?